El nombre científico de la cáscara sagrada es "Rhamnus purshiana". La corteza de este árbol, que crece principalmente en la costa oeste de los Estados Unidos y algunos lugares de Sudamérica,1 se utiliza principalmente para tratar el estreñimiento. La cáscara sagrada se puede encontrar como ingrediente en laxantes de venta libre.2 Además de aliviar el estreñimiento, la cáscara sagrada también ha sido utilizada por indígenas norteamericanos para tratar problemas hepáticos, cálculos biliares, dolor articular y muscular, gonorrea, indigestión, molestia estomacal y disentería (infección en los intestinos que causa dolor, fiebre y diarrea).2
La corteza de cáscara sagrada contiene antraquinonas. Las antraquinonas son substancias que se encuentran en las plantas y le dan su color. Debido a esto, se han utilizado como colorantes. Algunas antraquinonas de la cáscara sagrada, denominadas cascarosides A y B, también son responsables del efecto laxante de la cáscara. Cuando una persona ingiere la cáscara, los cascarosides interactúan con las bacterias que viven en el intestino grueso para formar sustancias que estimulan la evacuación intestinal.3
La cáscara sagrada está disponible como laxante de venta libre en forma de tabletas, cápsulas y líquidos.
En su forma básica, la corteza no se puede utilizar de manera segura hasta que tenga al menos un año o se caliente a más de 212 °F (100 °C). La corteza joven o que no está tratada tiene un efecto laxante demasiado fuerte y produce intensos espasmos y calambres intestinales.3
La dosis recomendada de cáscara envejecida cortada o en polvo es uno a dos gramos al día (el contenido de 20 a 30 miligramos de cascaroside A). Sin embargo, dado que pocas personas consumen la cáscara en bruto, las posologías varían considerablemente según el producto que contiene la cáscara sagrada. En consecuencia, es mejor revisar la etiqueta del producto para consultar la posología adecuada.
Asegúrese de leer la etiqueta si piensa administrarle el laxante a un niño, ya que puede haber instrucciones específicas para los niños. La cáscara no se debe administrar a niños menores de doce años a menos que su médico lo recomiende específicamente.
La sobredosis con laxantes puede causar náusea, vómitos, calambres abdominales y deshidratación. Tomar demasiada cáscara sagrada también puede causar dolor abdominal, diarrea, síncope, deposiciones con sangre, y en casos extremos, anormalidades electrolíticas y alteraciones del ritmo cardíaco.6
La cáscara sagrada se utiliza principalmente para tratar el estreñimiento.
En una revisión de laxantes utilizados en el tratamiento de la diarrea crónica, los investigadores no pudieron descubrir ningún estudio sobre la efectividad de la cáscara sagrada por sí sola o en combinación con otros laxantes.11 La evidencia para este beneficio se basa en su uso tradicional y los efectos conocidos de las antraquinonas cascarosides sobre la estimulación intestinal.
Algunos informes de casos han vinculado la cáscara sagrada con graves problemas hepáticos.5, 8, 7
La cáscara sagrada se debe evitar en casos de obstrucción intestinal, enfermedad inflamatoria intestinal (p. ej., enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa), apendicitis o dolor abdominal de origen desconocido.10
Dado que se dispone de limitada información sobre la seguridad de la cáscara sagrada, las mujeres embarazadas o que amamantan y los niños menores de 12 años no deben utilizarla.3
Algunas personas que toman cáscara sagrada pueden desarrollar dependencia a los laxantes.3
El uso frecuente también puede causar un cambio en el color de las deposiciones y la orina, pero esto no es dañino.3, 4 También se puede manifestar una pigmentación inofensiva dentro del colon.
El uso crónico, es decir, utilizar el laxante por más de siete días, pueda causar pérdida de líquido y electrólitos (p. ej., potasio) y pérdida de las contracciones musculares intestinales adecuadas. Este efecto puede aumentar si se ingiere medicamentos para el corazón, diuréticos, corticoesteroides o raíz de regaliz.9
1. Venes D. Taber's Cyclopedic Medical Dictionary. 20th ed. FA Davis Company; 2005.
2. Peters M. BMA A-Z Family Medical Encyclopedia. 2004.
3. Foster S. Peterson Field Guide to Western Medicinal Plants & Herbs. 2002.
4. Stimulant laxatives. PubMed Health website. Available at: http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmedhealth/PMH0000099. Reviewed February 1, 2009. Accessed September 17, 2010.
5. Nadir A, Reddy D, Van Thiel DH. Cascara sagrada-induced intrahepatic cholestasis causing portal hypertension: case report and review of herbal hepatotoxicity. Am J Gastroenterol. 2000 Dec;95(12):3634-7.
6. Malagelada JR, Malagelada C. Nausea and vomiting. In: Feldman M, Friedman LS, Brandt LJ, eds. Sleisenger & Fordtran’s Gastrointestinal and Liver Disease. 8th ed. Philadelphia, PA: Saunders Elsevier; 2006:chap 8.
7. Jacobsen C, Semb S, Kromann-Andersen H. Toxic hepatitis following consumption of the herbal medicinal product cascara sagrada. Ugeskr Laeger. 2009 Nov 9;171(46):3367-9.
8. Pittler MH, Ernst E. Systematic review: hepatoxic events associated with herbal medicinal products. Aliment Pharmacol Ther. 2003;18:451-471.
9. Go for natural laxative relief, but best if not from senna or cascara. Environmental Nutrition; 2002 May; 25(5):7.
10. Cascara. Memorial Sloan-Kettering Cancer Center website. Available at: http://www.mskcc.org/mskcc/html/69165.cfm. Updated August 24, 2010. Accessed September 20, 2010.
11. Frizelle F, Barclay M. Constipation in adults. Clin Evid (Online). 2007 Aug 1:0413.
Ultima revisión May 2020 por
EBSCO Medical Review Board
Eric Hurwitz, DC
Last Updated: 06/02/2020