Para muchos hombres saludables, la impotencia puede ser una fuente vergüenza poco frecuente y de poca preocupación. Pero para aproximadamente la mitad de los hombres con diabetes, la impotencia es un hecho doloroso de la vida diaria. La causa: neuropatía diabética, un trastorno del sistema nervioso que puede afectar las vías neuronales responsables de crear y mantener una erección.
La neuropatía destruye las señales cerebrales que normalmente viajan a gran velocidad junto con los nervios provenientes de la médula espinal hasta el tejido eréctil del pene. Normalmente estos mensajes del sistema nervioso liberan óxido nítrico, un químico que relaja las arterias en el pene, lo que permite un aumento en el flujo sanguíneo y hace posible la erección. También la neuropatía afecta los "mensajes de erección" que se envían del pene al cerebro: por ejemplo, en el transcurso de la estimulación del pene.
En otras palabras: un interrupción de la comunicación. Y eso significa no tener relaciones sexuales.
De acuerdo con the National Diabetes Information Clearinghouse, la neuropatía diabética se puede presentar en cualquier momento, aunque las probabilidades de desarrollarla aumentan más en una personas que padece diabetes. Generalmente se desarrolla durante un periodo de años y no muestra síntomas al inicio de su aparición. El riesgo de que se presente la neuropatía es más común en los fumadores, las personas mayores de 40 años de edad y los que han tenido problemas para controlar sus niveles de glucosa en la sangre. Aunque se está llevando a cabo investigación, actualmente se cree que los niveles de glucosa en la sangre persistentemente altos son la principal causa de neuropatía diabética.
La neuropatía no sólo es la causa de la impotencia en hombres con diabetes. También muchas personas que han padecido diabetes durante mucho tiempo sufren enfermedad vascular, lo que podría disminuir el flujo de sangre al pene. Además, los desequilibrios hormonales, los efectos secundarios de los medicamentos y otros problemas físicos que no se relacionan con la diabetes pueden llevar a la impotencia.
Además, las causas de la disfunción eréctil van más allá del bienestar físico. También el estrés psicológico puede ser un factor. Un estudio de 1997 entre hombres japoneses, reportado en el periódico suizo Urologia Internationalis, reveló que vivir simplemente con diabetes en sí puede ser lo suficientemente estresante para afectar el desempeño sexual.
Entonces un diagnóstico exacto es el primer paso hacia adelante para encontrar una solución. De acuerdo con Kenneth Snow, MD, director de la Sexual Function Clinic en Harvard University's Joslin Diabetes Center, los doctores pueden reunir casi toda la información del diagnóstico inicial por medio de un examen físico de rutina y un riguroso historial de paciente. Probablemente los doctores revisarán los niveles de azúcar en la sangre y del colesterol y, algunas veces, los niveles de testosterona, además de tomar las pulsaciones en todo el cuerpo del paciente para detectar signos de problemas vasculares.
En muchos casos, los médicos generales son capaces de diagnosticar y tratar la disfunción eréctil en sus pacientes con diabetes. Sin embargo, en algunos casos podría ser necesario consultar a un especialista. "Creo que los pacientes necesitan buscar a un especialista o asegurarse que su médico esté consciente de la serie de tratamientos," dice el Dr. Snow. Cuando elija un especialista, dé preferencia al que se enfoque en la disfunción eréctil, no sólo a la urología.
También los pacientes necesitan recordar que un doctor no lee la mente. Si un médico no tiene una imagen completa de la situación de un hombre (sin importar qué tan vergonzosa podría ser esa imagen para el paciente) estará mal preparado para recomendarle una solución.
Lo que podría percibirse como impotencia en realidad podría ser el resultado de los cambios físicos naturales que se presentan a medida que envejecemos. Aunque la edad avanzada no lleva automáticamente a la disfunción eréctil, muchos hombres de la tercera edad sienten que les lleva más tiempo o esfuerzo iniciar y terminar el acto sexual. Por ejemplo, no obtener una erección a la vista de una pareja sexual podría no ser del todo impotencia. Simplemente podría indicar que necesita más estimulación táctil, que visual, para lograr una erección. Los doctores deben estar dispuestos y suficientemente informados para investigar dichos detalles importantes y los pacientes necesitan compartirlos.
El tratamiento comienza dirigiendo los factores físicos que podrían estar contribuyendo al problema. Estos incluyen:
Más allá de las preocupaciones específicas de la diabetes, también los métodos que se utilizan para tratar la impotencia en la población en general son efectivos para los hombres con diabetes.
Un reporte de la Washington State University College of Pharmacy sobre "Terapias Actuales y Futuras de la Neuropatía Diabética" resume los enfoques actualmente disponibles para el tratamiento de la impotencia:
Como era de esperarse, el Dr. Snow ha observado una preferencia clara por la terapia oral en su clínica. Pero los pacientes que no pueden tomar Viagra (notablemente, los hombres que ya toman nitroglicerina) o que no quieren hacerlo, el Dr. Snow reporta que no existe un destacado segundo lugar en terapia. "Una vez que usted va más allá de la Viagra, la elección de tratamiento de las personas es muy variado, dependiendo de sus propios niveles de comodidad y vida personal."
Gracias a la variedad de tratamientos disponibles, la mayoría de los hombres que experimentan impotencia debido a la neuropatía diabética pueden encontrar una solución que funcione.
Eso es algo con lo que hay que excitarse.
American Diabetes Association
http://www.diabetes.org
Joslin Diabetes Center, Sexual Function Clinic
http://www.joslin.harvard.edu/
National Diabetes Information Clearinghouse
http://www.niddk.nih.gov
Canadian Diabetes Association
http://www.diabetes.ca/
College of Family Physicians of Canada
http://www.cfpc.ca/
Ultima revisión June 2016 por EBSCO Medical Review Board Michael Woods, MD Last Updated: 07/17/2014