Definición

Un quiste de Baker es una acumulación de líquido sinovial detrás de la rodilla. Crea un bulto apretado detrás de la rodilla.

Causas    TOP

El líquido sinovial ayuda a que la rodilla se mueva con suavidad. Un quiste de Baker ocurre cuando el exceso de líquido se expulsa hacia la parte posterior de la rodilla.

A veces, se desconoce la causa. En los adultos, puede deberse a problemas subyacentes en la articulación de la rodilla. En los niños, puede deberse a problemas con el pequeño saco lleno de líquido (bolsa sinovial) entre el hueso y las partes blandas de la rodilla.

Bolsa sinovial Copyright © Nucleus Medical Media, Inc.

Factores de riesgo    TOP

Los factores que pueden aumentar el riesgo de este problema en adultos son los siguientes:

• Anteriores lesiones en la rodilla o desgarros de cartílago
• Artrosis: desgaste y desgarro del cartílago entre los huesos
• Enfermedades inflamatorias, como artritis reumatoide y gota
• Cirugía de rodilla previa

Los factores que pueden aumentar el riesgo de este problema en niños son los siguientes:

• Osteocondritis disecante: la muerte del tejido óseo en la rodilla
• Desgarros de menisco: un desgarro parcial o total del cartílago de la rodilla
• Cirugía de rodilla previa

Síntomas    TOP

Los problemas pueden ser los siguientes:

• Inflamación redondeada detrás de la rodilla que puede agrandarse con la actividad
• Molestia o dolor con la palpación después de hacer ejercicio y de doblar la rodilla
• Dolor o presión en la parte posterior de la rodilla
• Dolor que puede trasladarse a la pantorrilla

Diagnóstico    TOP

El médico le preguntará sobre sus síntomas y antecedentes clínicos. Se le realizará una exploración física. Esta se centrará en la rodilla.

Se pueden tomar imágenes de la rodilla. Esto puede hacerse de las siguientes maneras:

• Ecografía
• Resonancia magnética nuclear (RMN)
• Tomografía computarizada

Tratamiento    TOP

El problema puede desaparecer por sí solo sin tratamiento. En otros casos, es posible que deba tratarse la causa subyacente.

Un quiste que es doloroso o que afecta la vida diaria puede necesitar tratamiento. El objetivo del tratamiento es controlar los síntomas y promover la curación. Las opciones son las siguientes:

• Medicamentos para aliviar el dolor y la inflamación, por ejemplo:
  • Analgésicos de venta libre
  • Inyección de corticoesteroide
• Fisioterapia para mejorar la fuerza, la flexibilidad y la amplitud de los movimientos
• Drenaje con una aguja del exceso de líquido en la rodilla

Las personas que no se benefician con estos métodos pueden necesitar cirugía. Se puede hacer para extirpar el quiste o reparar una articulación de la rodilla dañada.

Prevención    TOP

Actualmente, no se conocen indicaciones para prevenir este problema de salud.